La industria alimentaria es la industria responsable de la preparación, transformación, restauración, conservación y envasado de alimentos de origen animal y vegetal. Cualquiera de estos procesos está relacionado con la higiene y esterilización adecuada para el consumo humano.
Como primer ejemplo, podemos utilizar el ozono en la industria láctea. Por ello, utilizando el agua ozonizada como agua potable para los animales, desde el punto de vista microbiológico, le proporcionaremos agua rica en sal y minerales, además de agua completamente sana. El uso de un generador de ozono en la cámara de almacenaje también ayuda a evitar que crezcan varios hongos a medida que maduran.
Además, el efecto de secado del ozono a estas concentraciones es muy pequeño, lo que acorta el tiempo de parada. El ozono también se usa en la etapa húmeda o seca de los granos, que pueden descontaminar levaduras, hongos, bacterias y cualquier tipo de toxinas.